Como muchos de vosotros sabréis, el Atlético de Madrid fue fundado en 1903 por un grupo de estudiantes vascos que querían montar una sucursal del equipo de sus amores (el Athletic de Bilbao) en la capital de España y el primer nombre que se le dio a este nuevo equipo fue el de ‘Athletic Club Sucursal de Madrid’. Detrás de la razón del porqué viste de rojiblanco el Atlético de Madrid existe una curiosa anécdota ocurrida a finales de la primera década del siglo XX y que sería determinante en el futuro del equipamiento que utilizaría el equipo madrileño así como el Athletic de Bilbao.